La razón para este premio es doble. Por una parte, eurochem es la primera empresa de Castilla y León y la segunda de España que logra para sus productos de limpieza la Etiqueta Ecológica Europea, una distinción que concede la UE a aquellos artículos que demuestran igual eficacia que otros similares en el mercado, pero que a la vez resultan respetuosos con el medio ambiente y con las personas, ya que evitan componentes contaminantes o demasiado agresivas en sus fórmulas. Por otro lado, el Consejo Regional de Cámaras de Comercio e Industria de Castilla y León deseaba destacar la labor de una pyme, ya que, como explicó su presidente durante el acto, Manuel Vidal Gutiérrez, «el cuidado del entorno no es asunto únicamente de las grandes compañías».
El Consejero, D. Carlos Fernández Carriedo hizo entrega de una escultura conmemorativa, y en su intervención, calificó textualmente a eurochem como «un ejemplo a seguir por todas las empresas de la Comunidad».
Otras autoridades presentes en el acto, como Encarnación Redondo Jiménez, alcaldesa del Ayuntamiento de Soria, o Jesús Moya Moya, presidente de la Cámara Oficial de Comercio e Industria de Soria, coincidieron también en alabar el trabajo de eurochem para desarrollar productos respetuosos con el entorno.
¿QUÉ ES LA ETIQUETA ECOLÓGICA EUROPEA?
Es un símbolo oficial de la Unión Europea (Reglamento 1980/2000) para impulsar la oferta y la demanda de productos con menor impacto ambiental.
Sirve para distinguir los productos/servicios más respetuosos con el medio ambiente y ayudar a los consumidores a elegir dichos productos, y/o a su empresa a ser más “sostenible”.
Existen tres razones fundamentales para elegir la Etiqueta Ecológica Europea.
La primera es que es creíble, porque está basada en sólidos estudios científicos y de mercado, está respaldada por las Autoridades Europeas y por los Estados Miembros.
Es fiable, porque está certificada por un Organismo Oficial independiente.
Es visible, por lo que simplifica la elección a los clientes, cubre diversas gamas de productos y se beneficia de los esfuerzos promocionales conjuntos que las autoridades, tanto de la UE como de las comunidades autónomas, deben hacer para que este distintivo sea conocido y aumente la demanda y, por tanto, el número de certificaciones.